Esta semana, el cuerpo sin vida de una mujer panameña fue encontrado en una habitación del hotel Sonesta, ubicado en el norte de Bogotá, cerca del centro comercial Unicentro. Lisbeth María Sarmiento Concepción había llegado a la capital colombiana el 7 de mayo para asistir a actividades académicas relacionadas con una capacitación necesaria para continuar trabajando en una empresa extranjera.
En una entrevista con el diario El Tiempo, los representantes de la empresa que empleaba a Lisbeth María explicaron las razones de su estancia en Bogotá y compartieron información sobre su muerte. El abogado Fabio Humar, quien está al frente del caso en representación de la empresa, indicó que la mujer había llegado a la ciudad para asistir a una capacitación necesaria para su trabajo.
Según el relato de los hechos, Lisbeth María nunca salió de su habitación y no fue vista en el hotel. Fue a raíz de la alerta de una compañera de trabajo, preocupada porque Lisbeth no se presentó para asistir a los cursos, que las autoridades revisaron su cuarto. Allí encontraron el cuerpo sin vida de la mujer. Medicina Legal se encargó de la inspección del cadáver, con el apoyo del laboratorio móvil de criminalística Mercurio 3-9 Sijín.
El abogado Fabio Humar pidió no asumir versiones adicionales a las proporcionadas por las autoridades y aseguró que la mujer habría fallecido por causas naturales. Sin embargo, familiares de Lisbeth María han cuestionado las versiones oficiales. En una entrevista con Infobae, Jorge Sarmiento, hermano de la fallecida, afirmó que su hermana padecía de anemia falciforme y consideró que fue negligente por parte de la empresa permitir que se hospedara sola en un cuarto, sabiendo que requería monitoreo constante.
Jorge Sarmiento expresó preocupación por la falta de respuesta del consulado panameño y mencionó que la empresa les había comunicado que se pondrían en contacto con ellos para coordinar el traslado del cuerpo de Lisbeth María a Panamá. Los familiares esperan que la empresa asuma su responsabilidad ante los hechos sucedidos.
En este momento, lo más importante para la familia de Lisbeth María es que su cuerpo sea repatriado a Panamá para darle sepultura y permitir que sus seres queridos le rindan un último homenaje. Esta situación ha generado preocupación y debate en torno a la responsabilidad de las empresas en el cuidado de sus empleados durante viajes laborales y la necesidad de garantizar su bienestar y seguridad en todo momento.
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